Como estas semanas no es que haya subido mucho a Flickr, en realidad esto son mis fotos de las últimas 3 semanas.
Los últimos días del edén
La época de los "bichos" ha pasado tan rápido que casi ni me he dado cuenta, y en estos momentos son las libélulas y los caballitos del diablo (y durante poco tiempo) lo pocos macros de insectos que uno se puede permitir.
La toma no tiene misterio. Era un día nublado, por lo que no tuve que usar ningún difusor, y está hecha a pulso, sin mucha más historia.
Mi lugar de "caza" para estas criaturas, es una charca que han creado en la senda fluvial del río Piles. Hay además allí garzas, patos y demás fauna que visita estos lugares.

Sobre la toma en sí, realmente no tiene mucho mérito, ya que el momento y las condiciones eran tan especiales, que era casi imposible "cagarla". Había como se ve una neblina o bruma entre las rocas, que junto con la luz del sol al ponerse, le dio una luz espectacular. De hecho, no es sólo que no haya potenciado el tono rojizo del atardecer, sino que incluso tuve que rebajarlo un poco para que no quedara demasado "cantoso".
De dioses y hombres

La idea en esta toma era clara, intentar como fuera que no quedara totalmente quedada en la zona del claro entre las nubes. Para ello, se puede ver que la toma está subexpuesta, quedando algo oscura, pero sin dudas era un mal necesario.
Lo bueno de estas fotos con reflejo, es que hay mucha luz también en el primer plano, y no hace falta usar un filtro degradado o juntar dos exposiciones.
Paso a paso

Lo bueno de las orugas es que sabes que no van a salir volando asustadas cuando te acerques, y de hecho, ni siquiera corriendo a mucha velocidad. Gracias a esto, pude permitirme calma en la toma, y algo importante, pones un difusor para tapar el sol (que pegaba de lleno, y de hecho así se ve en las flores difuminadas del fondo) y un reflector para darle un poco más de luz. Un gusto poder hacer un macro a un insecto en estas condiciones ideales que tan pocas veces tenemos la oportunidad de aprovechar.
Un paraguas para tres

Decidí usar el objetivo 50mm a f1.8, ya que quería acentuar lo más posible el bokeh de la luz que entraba. Luego, de puntillas para poder enfocarlas bien, hice varia pruebas en manual de exposiciones, ya que la luz estaba bastante complicada de medir. Hubiera preferido que en la parte inferior derecha no hubiera ese manchurrón difuminado (el tronco del árbol), pero la posición no me permitió mejorar el ángulo.
Prácticamente magia

Está un poco subexpuesta para que la niebla, con bastante más luz que el resto, no quedara quemada. El resto lo hizo ese lugar.
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