Cayón

Aunque en esto de la fotografía, me he dedicado a buscar lugares interesantes y a viajar lo que he podido (cosa que antes no hacía ni de lejos), he tenido pocas visiones más espectaculares y estremecedoras que ver un amanecer desde el Monte Cayón.

Conocí el lugar por primera vez el año pasado en la "Kedada" de Toma 15, ya que fue el lugar donde emezó ese fantástico día. Así que antes de nada debería agradecer a Jose "Urugallu" y a Alejandro "el Magüetu" el organizar ese evento y a Roberto "KonCuidao" llevarme hasta allí, haciendome de chofer.
Encima de Infiesto, la bella capital, del maravilloso concejo de Piloña, se alza el Monte Cayón, de 553 metros de altitud. Que para los piloñeses es todo un símbolo, como asimismo lo son la sierra del Sueve, el Picu Vizcares, el Camín Real del Faceu o el Sellón. Otros signos de esa tierra son las avellanas, los asturcones, el Santuario de la Virgen de la Cueva y el río Piloña.
El Monte Cayón (también Cuesta Cayón) está al Norte de Infiesto, prácticamente sobre la población, y en lo alto podemos encontrar un área recreativa y un panel informativo qué nos muestra de manera clara todo lo que se ve desde sus impresionantes vistas.
Hay un par de maneras de llegar arriba, pero como yo sólo sé una, es la que contaré. Nada más entrar en Infiesto (desde Gijón u Oviedo) hay una desviación a la izquierda que indica el pueblo de Biedes. Veremos que la carretera va subiendo y debemos pasar el susodicho pueblo. Como un kilómetro pasado Biedes, hay una desviación en cuesta a la izquierda que tiene una señal de área recreativa (con una casa a su derecha), y es ahí por donde debemos subir. Si por casualidad nos la hubiéramos pasado, llegaremos al poco tiempo al pueblo de Argandenes, así que esa sería la señal clara de que hay que dar la vuelta y mirar mejor. El área recreativa se encuentra a unos 2 kilómetros. Poco antes de llegar arriba, la carreteara se bifurca en dos, debemos tomar la dirección izquierda y a pocos metros ya estará nuestro destino.
Las vistas desde arriba son espectaculares, pudiendo observar la Cordillera del Sueve o los Picos de Europa. Además, por lo menos en las fechas en las que yo he ido (siempre en septiembre), a esas horas podemos encontrar un auténtico mar de niebla cubriendo los valles que lo rodean, lo que da un aspecto casi mágico al lugar.
Así que mi recomendación es, que si podéis no lo dudéis y vayáis a un amanecer a este espectacular lugar, no os arrepentiréis.

Coordenadas: 43°21'42.03"N - 5°21'31.20"O